Cibercultura: ¿realmente es cultura?

sábado, 25 de julio de 2009

Cuando nos preguntan acerca del término cultura se nos viene a la cabeza cosas tales como: música, artes, dialectos, formas de vestir, etc., y que ésta está delimitada, en la mayoría de los casos, por un espacio territorial. El diccionario de la RAE lo afirma: “Conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época, grupo social”. Yo agregaría que ésta se trasmite de generación en generación; es la única forma de saber de ella a través de los siglos, aunque a veces no tan genuina como es su esencia primera.

Gracias a los avances tecnológicos y por las ansias de trasmitir información a mansalva, en los últimos años, se ha venido hablando de “Cibercultura”. Richard Faura la define como un “conjunto de técnicas, de maneras de hacer y de ser, de valores y de representaciones que están relacionadas con la extensión del Ciberespacio”. ¿Realmente es cultura? Faura, en su artículo Cibercultura, ¿realidad o invención?, expone una serie de características por las cuales podemos considerar la Cibercultura como cultura. Éstas con:

§ La cultura se trasmite de generación en generación: una generación se tiene un tiempo de más o menos 20 años. En el ciberespacio transcurre en un periodo más corto (cuatro o cinco años por generación). En el espacio normal no acostumbran a convivir más de tres generaciones a la vez, en el espacio cibernético podrán coincidir más de diez. La información en el espacio fuera del ciberespacio se transmite de mayor a menor, dentro de él no hay distinción para esto. Esta característica ofrece un gran enriquecimiento cultural al compararse los muchos puntos de vista; hay grandes cambios e intercambios de información.

§ La cultura es simbólica: Leslie White dice que el origen de la cultura nació en el momento que el hombre adquirió la capacidad de simbolizar. Los símbolos más utilizados en internet son los íconos: éstos ayudan a unificar en la Cibercultura de manera idéntica a lo que pasa a nivel internacional con las señales de tráfico. Otros símbolos utilizados son los llamados emoticones: son símbolos utilizados por los usuarios de internet para expresar estados de ánimos en diferentes momentos.

§ La cultura es compartida: ésta se transmite a través de grupos a los que se pertenece. El pertenecer a un grupo produce una serie de sentimientos. Los usuarios se sienten ligados y fácilmente identificados a los demás miembros de la comunidad.

§ Individualismo: característica asumida por todos los consumidores en el ciberespacio. El querer ser solo en un mundo donde grita que la información se transmita a través de la comunicación entre dos o más personas.
§ El valor de la iniciativa: posibilidad de un enriquecimiento económico rápido; todos tenemos la gran posibilidad de hacernos ricos. Está relacionado con el individualismo.

§ Igualdad de oportunidades: nadie prevalece, informáticamente, sobre el otro.
§ Liberalismo político: solicitud de no intervención de las instituciones públicas, impidiendo que éstas marquen las directrices de funciones dentro del ciberespacio. Rechazo total de trabas que la ley pueda poner. Se divulga la no existencia de fronteras y límites jurisdiccionales. Lengua franca: inglés.

Se puede considerar que sí existe Cibercultura, pero como todas las culturas, sólo participan en ellas una serie de personas (En esta cultura se reúnen todas las consideradas culturas en el mundo normal; la utilizan, más no depende de ella para subsistir). Por el hecho de que en internet no encontremos comida caliente, característica principal en una cultura, ésta no deja de serlo. La cultura no sólo es comida, o bailes, o ropas, etc., sino también la define acciones principales (personalidades, formas de pensar, etc.) de las personas que participan de ellas.

Por otro lado, algo que le falta a esta especie de cultura es la transmisión de sentimientos. Nunca los transmite. Una pantalla fría no es capaz de hacernos sentir lo que verdaderamente se siente cuando alguien nos da un beso, o un abrazo, o nos hace reír. Sólo se representa. No es lo mismo leer una carta a mano de la persona que nos quiere, a leer un corto mensaje dejado en el correo personal. No tienen el mismo calor. “Es raro que la comunicación a través de las redes informáticas sustituya pura y simplemente los encuentros físicos: la mayor parte de las veces, es un complemento o una ayuda”[1].

Se le valora a la Cibercultura la capacidad de recoger, trasmitir y compartir información en tiempos incalculables, como nunca antes en la historia. La única forma de que alguien utilice algo es hacerle que eso se le convierta en una necesidad. La Cibercultura ha respondido a problemas de autonomía y de poder individual. Es como se vuelve sumamente necesario utilizar la red. Esta necesidad consiste en la transmisión de información a gran escala a magnitudes de personas, en el menor tiempo posible. La tecnología ha hecho la vida del hombre un poco más cómoda. El avance se ha hecho notar: nuevas expresiones de pensamientos y formas creativas de hacer cosas. La gente del común es la que ha transformado la internet, gracias a la forma como utilizan internet.

Para que haya Cibercultura tienen que existir tres principios: la interconexión, la creación de comunidades virtuales y la inteligencia colectiva.

- La interconexión: la conexión es siempre preferible al aislamiento. Es un bien en sí.

- Las comunidades virtuales: se construyen sobre intereses, de conocimientos, donde se comparten proyectos, en un proceso de cooperación o de intercambio, y esto independientemente de las proximidades geográficas y de las pertenencias institucionales.

- La inteligencia colectiva: un grupo de personas con intereses comunes se reúnen para dar solución a los problemas que les suscitan.

Si no hay un computador con conexión a internet, si todo esto se acabara, la Cibercultura dejaría de existir.